Como un premio a la colaboración e implicación de todas las sociedades y entidades tafallesas en la edición de 1973, al finalizar aquella se pusieron ambas partes de acuerdo para anunciar que la siguiente edición, la de 1974 habría de volver a celebrarse en la ciudad del Cidacos. Y para que no hubiera duda del compromiso adquirido el Muthiko Alaiak dejó todas las ropas y complementos en Tafalla para no tener que volverlos a llevar en 1974. Y así se hizo. El niño Ángel Aranguren fue el niño coronado este año.